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Foto del escritorAndrea Gelvez

Cómo entender la personalidad de los niños de 2 a 12 años.




La personalidad infantil es un tema apasionante que ha intrigado a psicólogos, psicopedagogos y padres por igual durante diferentes generaciones y en este caso no es la excepción ¿verdad? Siempre nos ha llamado la atención cómo se genera o más bien, cómo se desarrolla la personalidad de nuestros hijos a lo largo de sus diversas etapas de la vida.


Pues bien, la personalidad se refiere a las características emocionales y de comportamiento que definen a un/a niño/a. Aunque cada uno es único, muchos estudios sugieren que hay ciertos rasgos y patrones comunes que se van desplegando a lo largo de las etapas del desarrollo y que pueden ayudarnos a comprender mejor su personalidad.


Estas características son:


Temperamento: Algunos/as chicos son naturalmente más tranquilos y fáciles de llevar, mientras que otros pueden ser más activos y enérgicos. El temperamento de un/a niño/a se manifiesta desde una edad temprana, más exactamente comienza a manifestarse al año o 2 años aproximadamente y puede influir en cómo interactúa con el mundo que lo rodea de ahí en los años siguientes. Comportamiento: Algunos/as chicos son tímidos/as y retraídos/as, mientras que otros son más extrovertidos/as y sociables. La forma en que un/a niño/a se comporta en situaciones sociales con su familia, amigos, adultos, bien sea en la escuela o colegio o en casa, puede ayudarnos a analizar más a fondo su personalidad.


Intereses y pasiones: Algunos niños pueden estar obsesionados/as con actividades más tranquilas o manuales, mientras que otros pueden preferir la música o los deportes. Estos intereses a menudo se transforman a lo largo del tiempo y pueden influir también en la formación de la personalidad.


Habilidades cognitivas: Las habilidades cognitivas, como la resolución de conflictos o problemas, la toma adecuada de decisiones y la capacidad de aprender, también tienen que ver en cómo un/a niño/a se enfrenta a diferentes situaciones y desafíos. Ahora bien, la personalidad de los chicos puede variar ampliamente de un niño a otro a lo largo de sus diferentes etapas. Algunos pueden ser alegres y extrovertidos, mientras que otros pueden ser más introvertidos y reflexivos.


De aquí que hablemos de los diferentes tipos de carácter que son 4:


Extrovertidos: Los/as niños/as extrovertidos suelen ser bastante sociables y disfrutan interactuando con otros. Son muy enérgicos y se sienten a gusto en entornos sociales. Les encanta conocer gente nueva y participar en actividades grupales. Podría equiparse con un niño fuerza, que como su nombre lo indica, tiene una fuerza increíble en su forma de ser y tiende a ser líder entre los demás.


Introvertidos: Los niños introvertidos tienden a ser más reservados y prefieren actividades en solitario o en grupos pequeños. Pueden ser más reflexivos y disfrutan de la soledad. A menudo, son observadores atentos y pueden ser más cautelosos en situaciones nuevas. En este caso podríamos compararlo con un niño seguridad que si bien su nombre indica que es muy seguro de sí mismo, es lo contrario. Requiere de mayor seguridad y confianza para enfrentarse a las situaciones del mundo, y ello va ligado a su tipo de personalidad reservada y tímida.


Sensibles: Algunos pequeños son especialmente sensibles a las emociones y necesidades de los demás. Son empáticos y tienden a preocuparse por el bienestar de los demás. Estos/as niños/as a menudo actúan como cuidadores naturales en sus grupos de amigos o familia. Podría equipararse con un niño cooperación, que como bien dice su nombre, le gusta cooperar y estar al tanto de las necesidades de los demás antes que las suyas propias.


Aventureros: Los/as niños/as aventureros son curiosos y valientes. Les gusta explorar y probar cosas nuevas. Son intrépidos y disfrutan asumiendo riesgos calculados en su búsqueda de experiencias emocionantes. Tienen una mezcla entre un chico fuerza y un chico cooperación, sin que tenga un rasgo más presente que el otro.


Personalidad y carácter en los niños de 2 a 7 años:


En los niños de 2 a 7 años podemos ver muy marcado los anteriores rasgos, sin que sea así por siempre. Puede que en la medida en que van creciendo y llegan a la etapa de los 7 a los 12 años su carácter y su personalidad cambie y pase de ser un niño con carácter introvertido a un carácter extrovertido o aventurero o viceversa sin que ello suponga que sea algo malo. Recordemos que la personalidad y el carácter son factores variables que pueden irse adaptando con el paso del tiempo y de las propias experiencias de vida, sin que sea algo malo.


También hay que tener presente que tener una personalidad tranquila y ser sensible no es malo, ni mucho menos ser enérgico y extrovertido tampoco. Ninguna es mala en sí, cada una es única y hace único a tu hijo. Lo importante es aprender a entenderla y saber cómo actúa tu hijo/a en diversas situaciones según su personalidad y ayudarle a manejarla de acuerdo con las circunstancias presentes.


Personalidad y carácter en los niños de 7 a 12 años:


Ahora, en los chicos de 7 a 12 años aparecen rasgos de una regulación emocional mucho más avanzada que en las etapas anteriores. Sin embargo, como les explicaba anteriormente, la personalidad varía de acuerdo con las circunstancias del medio y ello los obliga a estar fluctuando entre uno u otro tipo de carácter. Por ende, vemos a chicos que en un momento están super tranquilos y calmados, y al rato estar reservados o tímidos, o estar muy enérgicos y extrovertidos en un mismo instante y ahí es cuando llegan los papás a decirme en consulta: “Andrea, pero si mi hijo antes era super líder y ahora no… ahora poco habla, es reservado y tímido”. Todo ello producto de la interacción con sus pares y así mismo por esa variabilidad normal de su personalidad que se da en esta etapa y que no es fija todavía por lo que no lo será del todo hasta que sea un adulto maduro.


Otro punto con los chicos de 7 a 12 años es que a medida que los chicos crecen, sus habilidades cognitivas se expanden y se afianzan cada vez más, lo que influye en cómo interactúan con el mundo que los rodea.


De allí que hablemos de 3 tópicos muy importantes:


Pensamiento Lógico o crítico: A medida que crecen nuestros chicos y se adentran en el mundo de la preadolescencia desarrollan habilidades de pensamiento lógico mucho más profundo, haciendo que puedan comenzar a razonar y resolver conflictos o problemas de manera más eficaz llegando a verse en su capacidad para tomar abordar situaciones cotidianas de manera más madura.


Empatía: También a medida que estos chicos adquieren una comprensión más profunda de las emociones y las perspectivas de los demás, pueden desarrollar una mayor capacidad de empatía y consideración hacia lo que lo rodea.


Autoconcepto: Y en este aspecto, a medida que adquieren una mayor comprensión de quiénes son, qué les gusta y su valor personal, pueden desarrollar una imagen más clara de sí mismos, lo que también influye en su personalidad y en su carácter.


Por ello como padres debemos acompañar estas dos etapas tan hermosas en la vida de nuestros hijos y entender esas fluctuaciones y cambios en su personalidad y carácter que son muy marcadas y normales dentro de su sano desarrollo integral, y debemos educarlos hacia una búsqueda de una identidad real y verdadera, permitiendo que sean ellos mismos sin máscaras, sin prejuicios y siendo siempre ellos mismos en todo momento, sin importar la edad o la etapa del desarrollo en que se encuentren.


Ahora que ya sabes los tipos de personalidad que existen y cómo ellos se manifiestan en nuestros chicos de 2 a 7 años y de 7 a 12 años me gustaría que te cuestionaras: ¿con cuál tipo de personalidad identificas a tu hijo/a en estos momentos? ¿Cuál crees que es el tipo de carácter que presenta ahora o que presentó en esas etapas si ya está más grande?


Y también me gustaría que realizáramos un ejercicio y es preguntarte a ti también ¿qué tipo de personalidad crees que tuviste cuando estabas en estas etapas? ¿Eras del tipo explosivo que expresabas tus necesidades de manera intensa? ¿O eras más bien sensible? ¿Eras de los que expresabas tus sentimientos de manera explosiva e incontrolable? O por el contrario eras más bien tranquilo/a y calmado/a a la hora de comportarte cuando estabas en esas etapas?


Y habiéndote contestado estas preguntas, te dejo estos 3 tips fabulosos que te van a permitir entender todavía mejor la personalidad de los chicos en estas etapas maravillosas de su vida:


1. Enséñale a tu hijo lo que es la conciencia emocional: en la forma como ellos van creciendo, va creciendo también su comprensión y su conciencia de las emociones y sentimientos que van experimentando. Eso lleva a que sean más empático con las sensaciones de los demás y consolidando su personalidad y su carácter de manera más eficaz y asertiva según las circunstancias.


2. Muéstrale lo que es la comprensión emocional: A medida que crecen ellos aprenderán a afrontar sus propios miedos, incertidumbres, fobias y a interesarse más por el mundo intelectual. Debemos ser para ellos esos referentes de comprensión y apoyo emocional en las diversas situaciones en que se enfrenten para ayudarles a entender mejor lo que sienten, viven y experimentan diariamente y brindarles la confianza y seguridad que requieren para asimilarlas.


3. Explícale lo que es la regulación emocional: Mantente presente en cada uno de esos momentos de explosividad y de descontrol emocional y sé siempre ese puerto seguro de emociones donde pueda refugiarse y encontrar apoyo. Recuerda que tu ya viviste esas etapas y tu hijo/a está atravesando ese umbral, por lo que al ser modelo de regulación para él/ella, entenderá que hay formas efectivas y eficaces de ver el mundo y de controlar sus explosiones de emociones de manera adecuada, para ponerlas en práctica en cada uno de los momentos de su vida de aquí en adelante.


Espero que todo lo anterior te haya ayudado a entender y comprender mejor la personalidad de los chicos de 2 a los 12 años. Un abrazo enorme.

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